La impresión 3D comienza a resonar en el 2005 con el inicio del proyecto RepRap (Replicating Rapid Prototyper) que tenía como objetivo desarrollar una impresora 3D de bajo costo. Unos años después en el 2009 el proyecto recibe un fuerte impulso por la liberación de la patente de la tecnología FDM. Previo a esto Stratasys ya desarrollaba la tecnología acaparando el mercado con sus máquinas de alto valor e insumos propietario. Hoy en día, con un mercado nutrido por tecnología de código abierto, existe una oferta de impresoras 3D FDM de bajo costo que utilizan insumos genéricos y logran resultados similares.
La reducción de precio de los insumos genéricos ha vuelto costo-eficiente la impresión 3D de piezas voluminosas. Normalmente las máquinas que trabajan con insumos propietarios más caros suelen ofrecer volumen de impresión pequeño. En Trideo al día de hoy, tenemos equipos que permiten imprimir hasta 1 metro cúbico en una sola parte
